Los males de Ford no terminan. Mientras el fabricante esta luchando por encontrar una fórmula para arreglar la compañía bajo el nuevo CEO Jim Hackett,  un artículo del sitio 247/wallst cree que los males perduran, ya que esta lucha para superar a sus rivales, se ha hecho más difícil cuando las ventas tanto en América del Norte como en China, se están desmoronando.

Su movimiento crítico hacia los autos eléctricos es complicado por la competencia liderada por Tesla. Los vientos en contra y las lentas reacciones de la administración al mercado, sobre todo la caída del mercado hispano, plantean la pregunta de quién establecerá el rumbo para el futuro de Ford.

Los recientes problemas de Ford

Ford Motor Company fue fundada en 1903, y tuvo sus años de gloria, pero hoy en día, se enfrenta a más desafíos que en casi cualquier período en el pasado, a medida que sus ventas disminuyen en todo el mundo.

El fabricante ha abandonado en gran medida el mercado de sedanes en los Estados Unidos, debido a una caída en la popularidad de los mismos, mientras que la demanda de ventas de vehículos deportivos utilitarios, crossovers han estado estancada, debido a sus problemas de fabricación.

Si no fuera por las populares camionetas como Ford F-150, la automotriz estaría viviendo un periodo más que crítico.

Mientras tanto, las ventas de automóviles en el mercado más grande del mundo, China, han caído precipitadamente. Sus ventas en China cayeron un 26%.

En contraparte,  el precio de las acciones de Tesla ha aumentado recientemente a niveles récord, en gran parte debido a los primeros prometedores resultados en el gigante país oriental, donde la capitalización de mercado es ahora el doble que la de Ford y General Motors juntas.

Esto es extraordinario ya que Tesla vende una fracción de lo que Ford y GM hacen cada año. La capitalización de mercado es la mejor métrica para evaluar lo que Wall Street piensa de una corporación pública. Los corredores de bolsa, piensan que en una o dos décadas, Tesla pudiera sobrepasar a los dos gigantes.

La venta de vehículos no ha sido el único problema de Ford. La caída de las ventas se produjo al mismo tiempo que tuvo problemas para avanzar hacia los segmentos, que serán en un futuro altamente competitivos, los vehículos autónomos y eléctricos (EV).

Hackett, ex jefe de Ford Smart Mobility, prometió una reestructuración de $ 11 mil millones poco después de asumir el cargo en 2017. El plan ha provocado despidos, que incluyen el 10% de su fuerza laboral global de cuello blanco. Sin embargo, no ha cumplido con las futuras iniciativas eléctricas y autónomas.

El único comienzo visible de Ford en el mercado de vehículos eléctricos, hasta ahora, es el Mustang Mach-E. A pesar de que no estará disponible hasta finales de este año, Ford dice que tiene varias reservas para el vehículo, aunque no ha dado un número oficial, ni ha confirmado lo dicho.

Para mi entender el Mach-E ha sido solo un montaje de marketing, para utilizar un nombre como el Mustang que sigue vigente, y poder atraer a ingenuos compradores a la marca.

Ford dice que está apostando por los autos eléctricos, y la gerencia dice que tendrá 40 vehículos eléctricos en el mercado para el 2022, algo que ni Henry Ford saliendo de su tumba lo creería.

Claro, para simplificar las cosas algunos de estos serán híbridos, lo que reduce el número de sus autos que competirán directamente con Tesla.

Otros gigantes automotrices que están trabajando seriamente, como Kia,  Hyundai y Honda, tienen serios y demostrados proyectos, para poner vehículos autónomos y eléctricos en la carretera.

Lo mismo se puede decir de los gigantes tecnológicos, que están pisando el mercado automotor, siendo Waymo el más conocido de ellos, que es la subsidiaria autónoma de automóviles de Alphabet.

Ford quiere estar en el juego de la innovación, y se coloca entre los 50 principales cesionarios de patentes de Estados Unidos. Patentes que muy probable que jamás usaran, y que estar bajo el nombre oficial de “Ford Global Technologies”, quizás una compañía adherida que no pudiera caer en una posible bancarrota de la automotriz.

Las acciones de Ford cayeron un 38% en los últimos cinco años. El mercado de valores, medido por el S&P 500, subió un 58% durante el mismo período. El precio de las acciones de GM ha aumentado un 4% en ese momento. Toda una tragedia para un corredor de bolsa, que quiere vender acciones de Ford.

El Fracaso Chino

Según cita el sitio 247/wallst, el fracaso más profundo de Ford es su incapacidad para capitalizar el mercado chino, que había crecido rápidamente hasta hace poco.

El desafío para el fabricante es particularmente problemático ahora, dado que las ventas de vehículos en la República Popular han comenzado a caer.

A pesar de esta caída, China sigue siendo el mercado más grande del mundo, con ventas totales de 25,8 millones en el 2019, una baja del 8,2% ante el 2018. En Estados Unidos el 2019 lo dejaron con ventas de 17.1 millones.

China sigue siendo un mercado mayor que en los Estados Unidos, y el problema particular de Ford, es que su cuota de mercado está cayendo en un mercado chino cada vez más reducido, con más fabricantes locales, como Geely, GAC y otros, y toda la competencia mundial.

En 2012, Ford anunció que construiría una planta en el este de China a un costo de $ 760 millones de dólares. Desde el anuncio no se habló más del tema.

Quién tiene las riendas de Ford?

William Clay Ford Jr., el bisnieto del fundador Henry Ford, maneja principalmente los intereses de la familia Ford. Ha sido presidente del directorio de la compañía desde 1999 y actualmente tiene el título de Presidente Ejecutivo.

Ford ha tenido cinco directores ejecutivos desde entonces. La familia Ford posee alrededor del 40% de las acciones de Clase B, lo que le otorga un control efectivo sobre la empresa.

Además de Bill Ford y Jim Hackett, la membresía de la junta incluye a Edsel Ford II. La compensación de Hackett ese año fue de poco más de $ 17 millones. El de Bill Ford fue de casi 14 millones de dólares. Parece que las ganancias que reclaman sus accionistas minoritarios se las llevan sus ejecutivos.

Este me lleva a acordarme de la primera película de Wall Street con Mickel Douglas (Gordon Gekko en la película). Él era accionista de una empresa que estaba dando pedidas. Y en una reunión de accionistas, se presentan todos sus ejecutivos.

Gordon Gekko los mira a todos y les dice: “Yo quisiera saber qué hace cada uno de tantos vicepresidentes, con sueldos millonarios, algunos que ni sé qué cargo tienen ni que hacen”.

Y esto pudiera pasar en Ford, donde hay ejecutivos que cobran millones y solo están para la foto y las relaciones públicas. Ninguno le llega a los talones al venerado Lee Iacocca, que dejo a Ford por sus entredichos con la familia Ford, para salvar a la Chrysler.

En este Titanic de Ford, los que se salvaran son los que viajan en primera clase, porque los trabajadores de fábricas y empleados menores, se hundirán con la compañía, así como lo hizo el Titanic.

El Futuro de Ford tendrá un destino como el de Mercury, Plymouth, Saturn, y muchos más?

Ford tiene muchos obstáculos para llegar a sus metas. Primero, con las ventas de autos en Estados Unidos, las débiles ventas en gran parte de Europa y cayendo en China, siendo la única forma de aumentar las ventas de unidades, una nueva y fuerte participación en el mercado.

Ford tiene una competencia muy fuerte con muchos escollos por delante. Tanto General Motors como Fiat Chrysler, que han pasado sus bancarrotas, estas mejor posicionados.

Toyota, Honda, Nissan le llevan mucha ventaja en calidad, mientras Kia y Hyundai le están quitando clientes a diario.

Lincoln, la marca de lujo de Ford, quiere ser como Mercedes Benz, BMW, Audi y Lexus, pero no lo es, ya que  realmente compite con Cadillac, Infiniti, Acura y Genesis que está siendo un verdadero problema, ya que cuando salgan sus SUV’s de lujo al mercado, de algún lado vendrán los clientes, e históricamente han caído del lado de los tres de Detroit.

Ford habla y dice sobre los nuevos mercados de automóviles eléctricos y autónomos, pero esto requerirá grandes cantidades de capital, que Ford no tiene, además de que detrás de cada uno de estos nuevos modelos del futuro, se requiere un gran número de personal altamente técnico, y a Ford no se lo conoce por sus relevantes ingenieros.

El mercado Hispano, el eslabón perdido

El mercado Hispano, con más de 60 millones de habitantes, un 18% del país y subiendo, que es muy fiel a las marcas, con un grupo de jóvenes que supera en porcentaje de compra al americano, está tan quedado en el tiempo, como las canciones del Puma Rodriguez.

Ford no sabe cómo apuntalar el mercado hispano. Sus anuncios dirigidos mayormente a la TV abierta, parecen anuncios de la época de la abuela, como idiotizando al grupo étnico.

Sus relaciones públicas no se manejan desde Detroit y dejan que los que la hacen desde otros Estados, se basen en sus amiguismos, por lo que la información de la marca hacia la comunidad pasa a ser irrelevante.

Conclusión

Tesla no se gasta un centavo en los hispanos, ni en publicidad, ni en medios sociales, ni dando a conocer sus autos en los eventos, ni dejándolos probar. Pero debo decir que es una automotriz con un gran futuro, y un CEO como Elon Musk que es brillante.

En el pasado he criticado a General Motor y predije su bancarrota que ocurrió en el 2009. Los inútiles que manejaban General Motos a fin de los 90 y a principios del nuevo milenio, no tenían idea de los que hacían. Todo vino desde los 80. El que vio el documentan “Roger and Me”, lo sabe.

A Chrysler le predije la bancarrota también, y la han tenido en el 2009, en el año de la recesión económica. Hoy los critico  también, por ser la automotriz con los mayores limones, pero sus idead son muy distantes a las ideas de Ford. El futuro de ellos depende de Ram y Jeep.

Los ejecutivos de General Motors que manejaban el mercado hispano, hoy deben de estar trabajando en un McDonald. Pero GM tuvo un cambio de gente, de actitud y de camino. Y a pesar de tener un futuro empedrado, lo están manejando bien.

Creo que Ford seguirá el camino de General Motors y Chrysler y estará pronto en bancarrota, para buscar una organización que le dé un nuevo y vital empuje, que hoy no tiene.

 

Fuente: 247/wallst