Según dijo Barry Engle, presidente para General Motors en América del Norte, la producción del nuevo Corvette C8 Stingray del 2020, no comienza hasta principios de febrero, pero se han realizado suficientes pedidos por adelantado, para que se el modelo de ese año se agote antes de que llegue a los concesionarios.

El deportivo que fue catalogado como el auto de año por muchas organizaciones, ha entusiasmado a los admiradores del modelo y la prensa automovilística, que han esperado décadas para que GM finalmente haga un Corvette de motor central, y traer un deportivo de clase mundial.

General Motors tuvo una prolongada huelga y posteriores negociaciones con la UAW causaron la demora de la fabricación del nuevo Corvette, que inicialmente, estaba programado para entrar en producción a fines del 2019.

A pesar de las dificultades de fabricación, los concesionarios han estado tomando órdenes a la carrera, con aproximadamente 40,000 pedidos con depósitos, que ya tienen en carpeta.
El Corvette C8 de motor central tiene un precio inicial de 59,995 dólares en el modelo base, pero las versiones completamente cargadas pueden hacerlo pasar de 100.000 dólares.

La automotriz ha pedido a los concesionarios que vendan el nuevo Corvette a un precio de etiqueta y no incurrir en agregar costos que pudieran ser inexistentes, pero las reglas dicen que los distribuidores son empresarios independientes, y que ellos tomarán sus propias decisiones sobre el precio de venta.

La noticia de que los Corvette del 2020 ya están agotados antes de salir de fábrica, ha hecho que su precio inicial sea solo un número, que seguro no se usará en la negociación con el concesionario.