Los planes de cambio establecidos por el CEO de Ford, Jim Hackett, no dieron ninguna señal de que la compañía tomó el rumbo correcto.

Ford dió unos terribles resultados del 2019, que redujeron el stock de acciones de la compañía hasta en un 9%. Los ingresos anuales cayeron a $ 156 mil millones de $ 160 mil millones el año pasado. Las ganancias por acción del año fueron de $ 0.01, en comparación con $ 0.93 del año anterior.

Pero no termina ahí, ya que las perspectivas de que la compañía cambie de rumbo es pésima, ya que los números del cuarto trimestre fueron peores. Los ingresos cayeron un 5% a $ 39.7 mil millones, y Ford registró una pérdida neta de $ 1.7 mil millones para el período.

Hackett comentó sobre los resultados: “Financieramente, el desempeño de la compañía en 2019 fue inferior a nuestras expectativas originales, principalmente porque nuestra ejecución operativa, que generalmente hacemos muy bien, no fue lo suficientemente buena. Reconocemos, asumimos la responsabilidad y hemos realizado cambios debido a esto”. Ni el mismo se lo cree.

Hackett, quien fue nombrado director ejecutivo en mayo de 2017, prometió reestructurar la compañía, ahorrar dinero y llevar a Ford a un futuro de autos eléctricos y autónomos.

Pero los inversores han mostrado un creciente escepticismo, mientras los ejecutivos se llenan sus bolsillos.

El S&P 500, la biblia de las compañías americanas, ha subido un 26% durante el mismo período, mientras las acciones de Ford cayeron un 15% en los últimos dos años.

Los principales problemas de Ford incluyen un desempeño extremadamente pobre en China, el mercado de automóviles más grande del mundo, y solo resultados promedio en su mercado local.

Ford no ha tenido un lanzamiento significativo de autos autónomos o eléctricos como su mandamas prometió a los accionistas. El lanzamiento del vehículo eléctrico, que fue llamado Mustang Mach-E no califica, ya que se espera que sus ventas serán pequeñas.

Llamar Mustang a un SUV eléctrico fue un claro manotazo de ahogado, o disfrazando a la ovejita de lobo. No se puede usar celebres nombres de modelos icónicos para lanzar otros, porque si estos otros fallan, el icónico nombre quedaría en duda.

Los problemas con las transmisiones falladas de los Fiestas y los Focus, que generó una millonaria demanda colectiva contra la automotriz, ha hecho que Ford archive y olvide esos nombres, para unos futuros modelos eléctricos.

Ford necesita ir más lejos junto con sus planes en las áreas autónomas y eléctricas, pero se han quedado atrás, mientras su acérrimo enemigo, General Motors, se encuentra a la vanguardia de estos adelantos tecnológicos.

Los esfuerzos de Ford para crear un nuevo futuro están lejos de serlo y continuarán siéndolo, mientras los vehículos eléctricos y autónomos sigan lanzados tanto por grandes compañías automotrices, como por empresas tecnológicas, incluido Waymo de Alphabet.

Ford no tiene un solo ejecutivo Hispano en Detroit, como si a los ejecutivos de la marca le molesten un apellido López o Pérez. Con un 17% del mercado automotriz, la fuerza de compra hispana que es más joven que el mercado en general, es dejada de lado, ya que no la comprenden.

Solo el Ford F 1-50 está entre los vehículos que compran los Hispanos, pero acotemos que la F-150 es el vehículo mas vendido del país, y por décadas, y está detrás de su competencia, el Chevy Silverado y la Ram 1500 en gustos hispanos.

El Ford Ecosport fabricado en India y muy conocido por su nombre en Europa y Latinoamérica, hubiera sido un buen punto de venta para los Hispanos. Pero su gente de marketing entendió otra cosa, y no apuntó al mercado como debería.

Hackett dijo que reconoce que el desempeño de Ford está muy por debajo de los planes. “Chocolate por la noticia”, dirían algunos medios en Latinoamérica.

Esa no es una noticia nueva, pero como dice el sitio 24/7wallst, cuando su mandato como CEO se pone en perspectiva y luego de una debacle anunciada, esa posición queda en riesgo.

El futuro de Ford necesita un resucitado Lee Iacocca o un José Muñoz, ejecutivos que han sabido poner a las automotrices donde deberían estar, y nó dejándola llevar por la corriente.

Vengo diciendo hace tiempo que la debacle de Ford está cerca, y en el 2021 debe pagar un préstamo que hoy ni en sueños pudiera. Solo un milagro pudiera salvarlo de la bancarrota, y Ford no tiene ejecutivos con gran talento, (salvo Edsel Ford), que pudieran traerle una solución.

Luego de haber visto la muy buena película de Ford contra Ferrari, lo deja pensando de porque esta sucediendo esto a la compañía. Otra época, otros ejecutivos, otra manera de pensar. Y claro, también estaba Iacocca, que hoy y en paz descanse, no está.